Hoy en día, vivimos en un mundo donde queremos todo de una manera fácil y rápida. Hablando de Salud, la medicina se ha convertida en un gran aliado para sentirnos bien. 

Si comprendemos que nuestro cuerpo y mente están íntimamente ligados, y que la mente produce emociones que a su vez se convierten en energía, sería más fácil entender como estas energías se van refugiando o “instalando” en diferentes partes del cuerpo, las cuales se manifiestas de varias maneras.

Esto lo percibimos por ejemplo; cuando tenemos gripas recurrentes, en realidad es nuestro cuerpo que esta exhausto, o cuando hacemos muchos corajes se refleja en el estómago con dolor o malestar. Todo pensamiento consciente o inconsciente, el cuerpo lo expresa de alguna manera, las emociones hablan y el cuerpo es el medio para expresarlas y si negamos el dolor, éste se revela y se enferma, por lo general se “inflama”.

Los dolores son señales que nos intentan decir algo, por eso es importante mirar en nuestro interior, escucharlo, sentirlo, observarlo, salir de nuestra zona de confort, ser responsable de nosotros a través de la conciencia.

La vida nos presenta oportunidades para crecer, para mejorar, para trascender, lo cual no es fácil, porque significa juzgarnos.

Tomémoslo como un reto y aprendamos a escuchar a nuestro cuerpo con conciencia para permitirnos finalmente alcanzar la libertad emocional.

Cuando te sientas incomodo SIN JUZGAR, ANALIZATE Y ESCUCHATE. Si escuchas a tu cuerpo cuando murmure, no tendrás que escuchar cuando te grite.